Tu mandas

Se levanta el inacabable misterio acabado en caoba, y chirrian las gomas de las zapatillas en el brillante piso de San Pedro. Que poquito queda para cuadrar a los 45 corazones delante de ese dintel. ¿Pero esta puerta es cada año más pequeña?. Resonará la inconfundible y clasica voz del Tri con su "derecha alante Leo" y otra vez estarás en la calle. En tu calle. Le dicen Ricardos, pero sabemos que es tuya. Ese día y esa noche mandas tu, jefe. Sonará Este es mi Cuerpo, tu marcha, por que ese día es así, es tu día.

Son muy poquitas ya las noches en las que me acostaré pensando en el martillo que va a llamar el Domingo de Ramos, y muchas en las que recordaré el momento.