
Como cada año, sin darnos cuenta, se nos echa encima la navidad. Fechas de alegría y solidaridad para con los demás. Como todos sabeís la navidad es ese periodo de tiempo que transcurre entre el sorteo que lleva su nombre, y el día de los regalos, que viene a ser algo asi como la traca final.
Antigüamente, dicen los viejos y los carcas, que se conmemoraba el nacimiento de "nosequien", pero es una historia muy rara por que dicen que nació de una mujer virgen, y que se hizo famoso sin teles, ni internet, y sin entrar en gran hermano. Hoy día está mucho más arraigada la idea de que la navidad es una época para colaborar socialmente y engrosar las arcas de las grandes superficies. Que también tienen derecho.

Pero también tiene una gran utilidad espiritual. Es la fecha idónea para "lanzar" (cuidado, no nos vaya a tocar) una moneda al pobre que nos abre la puerta del Corte Inglés, y apagar de una vez por todas esa vocecita tan molesta que a veces le da por hablar en nuestra cabeza.
Pero el mérito de este invento de la navidad no es nuestro. Desde que en la década de los 30 Coca-Cola vistiera a San Nicolás (¿o no llegó a ser santo? tendría que buscarlo la verdad. No lo se) de rojo en lugar del tradicional verde, la desespiritualización ha ido en aumento.

Nadie se moleste por mis palabras. Yo mismo soy un producto de la sociedad y gastaré algo de mis pobres ingresos en agasajar a aquellos que tengo durante todo el año olvidados. Alomejor yo también lanzo una moneda. Maldita sociedad.
Me decían hace poco que lo bonito de esta fecha es ver la ilusión reflejada en la mirada de un niño que espera ansioso la cabalgata de reyes. Eso es una enorme verdad. Pero ¿porque no les explicamos a los niños que los reyes son solo una parte de estas fiestas? ¿no les decimos que se celebra el nacimiento del Salvador? y si se lo decimos ¿porque no actuamos -los adultos- consecuentemente?

En fin, yo creo que esto está muy mal montado. La idea es buena, pero en algún momento perdimos el camino y nos hemos metido en una arboleda de la que ahora no sabemos salir. Pero claro ¿quien soy yo?
En cualquier caso, dejo que la sociedad me arrastre y si todo este circo te gusta, y te emocionas con el, te felicito las fiestas.
Este villancico lo pongo todos los años. Estareis ya hartos....